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¿QUE ES LA CONTAMINACIÓN ELECTROMAGNÉTICA Y POR QUE PROTEGERSE?
La contaminación electromagnética es una toxina ambiental que nos rodea a diario donde quiera que estemos. Es un problema en continuo crecimiento debido a nuestro modo de vida moderno, en el que convivimos cada vez más rodeados de campos electromagnéticos polarizados artificialmente generados por las telecomunicaciones y todas las tecnologías que usamos y que han sido creadas por el hombre.
Es una radiación no ionizante producida por las telecomunicaciones o cualquier dispositivo eléctrico, ya sea alimentado por corriente alterna (AC) o corriente continua (DC). Este tipo de radiación suele denominarse radiación artificial porque proviene de fuentes artificial es, y sus características y patrones de oscilación no se encuentran en la radiación producida por fuentes naturales.
El origen de la CEM no está en la onda portadora, sino en la perturbación que se produce en el área circundante a ella, para su correcta comprensión se pueden imaginar las ondas que se generan en el agua cuando una gota cae.
Esa perturbación que producen los CEM artificiales provoca un cambio en la orientación de los spines, polarizándolos, algo que nuestro cuerpo no puede interpretar produciendo daño en nuestra actividad biológica y haciendo necesario que tengamos que protegernos
Y es que, aunque los seres humanos somos seres electromagnéticos en continua interacción con el campo electromagnético de la tierra hemos de tener en cuenta que los CEM Naturales no generan esa polarización.
De ahí la incomprensión de nuestras células ante algo que no reconocen y por consiguiente el impacto que ello produce en nuestro bienestar.
En otras palabras, esta polarización produce una degradación del sistema, una pérdida de electrones y un alto nivel de estrés oxidativo.
